2.25.2010

Misticismo

Decir que nacimos, luego crecimos y luego morimos debería ser tan falso como decir que morimos, luego decrecemos y finalmente nacemos. La verdad de lo que parece una vida individual es meramente el aislamiento ilusorio de un elemento en el ser atemporal e indivisible del universo. No hay distinción entre mejoramiento y deterioro, no hay diferencia entre el sufrimiento que termina en felicidad y la felicidad que termina en sufrimiento. Si encontramos un cadáver con una daga clavada, no hay diferencia entre si el hombre murió de la herida o si la daga fue hundida después de la muerte.
Tal opinión, si es cierta, no solamente acaba con la ciencia; sino con la prudencia, la esperanza y el esfuerzo; es incompatible con la sabiduría secula y -lo que es más importante para la religión- con la moral.

B. Russell. Religión y ciencia. Breviarios FCE. 2000

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